La revista Nature está proporcionando una visión de la ciencia detrás de la investigación del Antrax. La revista sospecha que el FBI utiliza el sistema biosensor T5000 para identificar la cepa del agente patógeno. Inmediatamente después de los ataques con ántrax del 2001, en el que cartas que contenían esporas fueron enviadas por correo a las oficinas de prensa de los medios y para los miembros del Congreso, los laboratorios de todo Estados Unidos se apresuraron a secuenciar la cepa de Bacillus anthracis. En el año 2003, la secuencia del genoma de la cepa fue publicada por un equipo dirigido por el Instituto de Investigación Genómica en Rockville, Maryland. Al mismo tiempo, los investigadores estaban buscando nuevos métodos para vincular las muestras postales a los aislados de virus existentes. El T5000 funciona mediante el uso de un espectrómetro de masas para medir la masa total de una muestra, junto con un desglose del número de cada uno de los cuatro nucleótidos en la muestra. El tipo de microbio puede ser identificado comparando las secuencias de los nucleótidos con el de cepas conocidas, de tal modo que une específicamente una muestra a otra.
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